miércoles, 10 de junio de 2015

Los monstruos de él y ella




Las historias de ese gato loco

Los monstruos de él y ella

"Desde la cama, desnudos,  todos nos convertimos en monstruos. Animales capases de llenar de poesía las sábanas en una noche de ésta selva de asfalto sin alma.  Desde lo salvaje,  nosotros los periodistas no actuamos como los humanos,  no necesitamos ser parte de ese teatro.  Somos reales,  "naturales", fluimos como la sangre, dispuestos a dejarnos correr como ella por la vereda. Sólo por nuestras creencias, por lo que creemos correcto, por no dejar morir nuestra poesía...creamos  nuestro  propio cielo lleno de demonios."

Performance Beast




Los monstruos de ella:

Nunca tuve esa libertad, ni contigo ni con nadie, de hablar sin filtrar los pensamientos que se escurren por mi lengua. Siempre debo controlar, medir, el grado de veneno al expresar mi enojo, mi furia y mi frustración. Es injusto, me esclaviza pero debo hacerlo porque a ti no puedo herirte, a ti menos que nadie... 

Contigo no sólo comparto la cama (para cualquiera eso salta más que a la vista)no me hace falta enumerarlas porque eso haría de este escrito un texto infinito; sucede lo mismo con las cosas que amo de ti, las que deseo y que me hacen pensar antes de dormir que me encuentro justo en el lugar correcto en el tiempo perfecto... Pero cuando se trata de lo malo, de lo frío, de las sábanas que se escapan heladas de nuestros cuerpos y nos dejan vulnerables yo sólo te quiero pedir una cosa, como diría mi madre "De la manera más amable posible":  Nunca te vayas sin despedirte. Ni las noches que te aburres de mi presencia y decides irte, ni cuando sientes asco de mis actos y ya no soportas verme y por favor, escucha, que esto también cuenta como si te fueras sin decir adiós,  no me alejes de tu cuerpo cuando estamos juntos en el sueño porque ya no soportas mi pegajoso calor y ya no quieres tocarme sin antes besarme. Te lo pido por favor, que no sean mudos tus rechazos e indiferencias, que prefiero mil veces tus garras, gritos.  mordidas y nalgadas antes de tu espalda al filo de cama.    

Los monstruos de él:


Todo aún tiene una solución...Me gustaría decir que siempre estaremos juntos... miento, te lo digo a pesar de no tener control absoluto sobre el futuro, sobre tus acciones ni las mías, pues de las cuales yo no soy ni cerca su dueño...
Pero aún así déjame decírtelo,  porque hoy te amo, hoy te deseo y hoy creo que descubrí en ti la profundidad de un mar que no conocía, con nuevos paisajes y bestias, que nunca quiero dejar de explorar. Hoy, hoy me inunda un azul que creí imposible de ver, una fría y cálida sensación que eriza mi piel y me detiene, vuelve a este espacio entre ambos infinito, donde no existe el tiempo...nunca a existido entre nosotros. Por ello, hoy, es mi turno de pedirte una cosa "de la manera más amable posible":  Deja de ser tan melodramática, deja de imaginar los interminables futuros sin mí,  ¡Detente! de mirar al vació y pensar que me perderás cuando aún sigo a tu lado, o sí  no, si que me obligarás a arañarte, gritarte y nalguearte, porque yo nunca me voy sin decirte adiós con un beso, me enfado lo suficiente como para no querer verte ni me alejo de ti en los veranos más ardientes. Dejemos que se escurran las sábanas frías y chupen el suelo, yo me siento protegido a tu lado. No importa si es el centro, el lado o el filo de la cama.  

Los monstruos de él y ella parte 1       



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